En el televisor, el tiempo no pasa. Me entero de que las muñecas de papel siguen haciendo de las suyas: congelan el retrato y todas toman el té recién terminadas. La laca sobre colores chillones, siendo lo que yo no soy, carne para otros, papel pegado sobre papel pegado que se esconde tras el blanco.
La enfermedad del deseo - introducción.
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Todos y cada uno de nosotros está enfermo de deseo. Decir esto es tanto
clásico como moderno, pues ya lo sabía Buda hace 2500 años pero también
podrías d...
1 comentario:
Qué bien que escribas, Andrea; que estés ahí de vez en cuando para traer aire frío y fresco...
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