lunes, 28 de febrero de 2011

Repertorio

El exceso de información conduce a la imprecisión.

La vanidad no necesita de interlocutores, tan solo de seguidores y de admiradores.

Bogotá, 2011

jueves, 24 de febrero de 2011

Escena de la vida

Dentro de las pocas cualidades que poseo, dijo el hombre mientras sostenía la copa entre sus manos, está el desvanecimiento.

La mujer no dejó de llevar trozos de comida hasta su boca y, después de un sorbo, soltó lo siguiente:

-La única que tengo yo es la del olvido.


Bogotá, 2011

miércoles, 23 de febrero de 2011

La delgada línea que nos separa [A propósito de Hiromi Ozaki]

Si se puede reproducir la sensación, es probable que lo que nos separa consista tan solo en una delgada línea...






Bogotá, 2011

Preferencia musical 1

Del destino y otras miserias

Algo nuevo para sumar a mi vida: aquellos que viven de la declaración de su dolencia son verdugos, no solo de su propia existencia, sino que también desean ser verdugos de la existencia de otros.


El refrán que aplica a esta situación: "Más vale tarde que nunca".

Bogotá, 2011

martes, 22 de febrero de 2011

Las teclas sobre el asfalto

Tal vez este título ya ha sido empleado por alguien. Al escribirlo, no puedo impedir el eco tras el tecleo de cada una de las letras.

Bogotá, 2011

domingo, 20 de febrero de 2011

L’auteur est mort, Vive l’auteur!

Algunos autores se empeñan en no morir tras la escritura del libro. Disfrazados bajos los motes de ‘autorefencialidad’, ‘autobiografía’, se convierten en personajes en busca de inmortalidad a través de la escritura. Creo saber el porqué de ello, ahora que me han contado el método de escritura que emplea uno de los jóvenes que dirige un taller de creación literaria, y que ha sido declarado como método de impulso creativo por otro de ellos, como primer estadio de una de sus primeras novelas publicadas:

Método rápido para escribir novelas

  1. Compre un cuaderno (no importa de cuántas hojas, rayado, cuadriculado, sin nada, argollado, grapado, cosido, tan solo importa que lo adquiera)
  2. Siéntese cada día a consignar en él lo que sucede en su vida
  3. Saque el fragmento que más le guste
  4. Arme con ella una historia
  5. Escriba su novela

Bogotá, 2011

viernes, 18 de febrero de 2011

El onanista y la novia

Hoy tengo la historia: una rubia que entra a una casa, con un hombre, mientras un taxi la espera.
Después de dos horas y media, la rubia sale, corriendo, desnuda, con la ropa en la mano y se sube al taxi.
El taxista le pregunta que si puede hacerle una preguna.
La rubia, que es preciosa, le contesta afirmativamente.
Y justo es ahí, donde empieza la historia.
Bogotá, 2011

jueves, 17 de febrero de 2011

Escena de la vida real

Eterna discusión de quién fue primero: el huevo o la gallina. El autor se sienta entre el público y deja que hablen de su obra. El espectáculo es hilarante y un tanto patético. En la mesa, una voz sale de una grabadora-mezcladora (el crítico, por supuesto) que se encarga de pegarle, a como dé lugar, algunas teorías literarias a la obra para así justificar su lugar en el mundo (el del crítico, por supuesto).
Bogotá, 2011

miércoles, 16 de febrero de 2011

Ejercicios parresíacos

Motocicletas se montaron por el andén, yo me les atravesé sin tiempo de que me esquivaran. Les grité que salieran de mi camino. Después vino la satisfacción del grito a la nada y a todo.
Bogotá, 2011

miércoles, 9 de febrero de 2011

La acción

Las manos del escritor se sostienen, sobre la hoja, gracias a un artilugio. La cosa se complica cuando se recurre al teclado de una máquina de escribir o de un ordenador. El reto para quien fabrica el objeto de movimiento es encontar la fuerza exacta de oprimir cada tecla sin que los mecanismos se enreden con los dedos o con las piezas metálicas o plásticas. Más terrible aún es que el nivel de sutileza, el impulso de cada uno de los golpes, sea tan fascinante y formidable para que el escritor no albergue la mínima sospecha de que alguien extraño a él oprime la tecla.
Bogotá, 2011

domingo, 6 de febrero de 2011

Éxitos de los ochenta

De la tarde, una recopilación de éxitos de los ochenta en el bolsillo.

Bogotá, 2011

viernes, 4 de febrero de 2011

Traducción de una pieza de contrabajo

Como el sonido del cucarrón,
gorgojeo que es el anuncio del paso del tiempo.
No quiero ser circunstancial,
solo vivo de la circunstancia.
Afuera llueve,
los pájaros se han escondido,
de mis ojos,
solo de los míos.


Bogotá, 2011

martes, 1 de febrero de 2011

Vértigo

Cada vez asisto con más frecuencia al espectáculo de los aprendices de crítico. Resguardados durante el día, en sus jaulas prefabricadas de ejemplares de libros, ensayan, sobre el papel, sus coreografías. Por la noche, montados en la escena de una mesa, un vaso de agua y un público ávido de sus iluminaciones, los aprendices de crítico abren la boca frente al espejo. En eso consiste su éxito.
Bogotá, 2011