viernes, 3 de julio de 2009

Miercolandia, como la llamaba Barba Jacob

Hay un vértice que aparece en la intersección de tres puntos. Cáliz o abstracción de una sexualidad (permite leerla como ‘comunión’), cada punto se prolonga hasta toparse con otro que es como sí mismo. Las coincidencias no existen. La coincidencia es un encuentro que se evita a toda costa y que apela a nuestra naturaleza fallida e imperfecta. José María Vargas Vila (1860-1933), Porfirio Barba Jacob (1883-1942) y Fernando Vallejo (1942). Yo no la evito.

“Yo llevo la Soledad conmigo y la esparzo en torno mío como una atmósfera. Nací con el alma de solitario. Solitario he vivido y solitario moriré.”
Diario, José María Vargas Vila


“Yo no he buscado nunca la amistad: la he rehusado siempre. Le he cerrado las puertas de mi corazón, como al amor”
Diario, José María Vargas Vila


Vengo a expresar mi desazón supremay a perpetuarla en la virtud del canto. Yo soy Maín, el héroe del poema,que vio, desde los círculos del día,regir el mundo una embriaguez y un llanto.
“Acuarimántima”, Porfirio Barba Jacob


Recomendados:
[Todos] Porfirio Barba Jacob, José María Vargas Vila y Fernando Vallejo.

2 comentarios:

María Isabel Gómez Castillo dijo...

Me parece que es la primera que visito este blog, pero los versos publicados en esta ocación me gustan. Son ciertos, propios de muchas vidas elegidas así para ser felices..., cada uno, a su manera.
Isabel Gómez

www.fluidoabsurdo.blogspot.com dijo...

En esto radica el encanto de lo literario. Que no ciega, no ensordece, no enmudece, no amarra...