Las anécdotas editoriales apuntan a que el éxito en la escritura va acompañada de un rostro, aunque ese rostro sea su ausencia (Pynchon). Lo que pocos editores (y muchos escritores) saben es que, el rostro de un escritor, no es cosa diferente a su escritura.
Bogotá, 2011
1 comentario:
Odio al critico. Amo tus letras
amo tus letras
por la realidad que me liga a la vida
y odio lo que me separa de ella.
lo odio, como vos odias
la falta de tacto.
odio los escritores que enseñan la moral
y discuten o mejoran la base comercial.
los odio porque tienen
aparte del deseo oculto del beneficio
un conocimiento ridículo de la vida
que ellos a través de otros
han canalizado.
se empeñan en acumular las categorías
marcando sus ganancias.
¨la literatura se ha prostituido¨
sus pseudo-lectores los leen
y siguen adelante
deletreando como analfabetas
lo que come una raza débil,
una masa voraz.
no hay mucho que añadir.
los relatos que amo
son aquellos que leo
desprevenido a media tarde
obras nacidas de tu necesidad
dejando atrás tu función
sin egoísmo.
Cada página que escribes
se abre con furia,
ya sea por serios motivos,
profundos y pesados,
ya sea por el amor, el odio
o el vértigo,
lo nuevo y lo eterno,
la aplastante espontaneidad verbal,
el entusiasmo de los principios,
o por los modos del critico,
seguro no. mejor así
un mundo vacilante
que huye,
atado a la prosa infernal,
métrica y asfixiante
y he aquí, por otro lado, los lectores como yo
que les importan tres huevos los críticos
y sus teorías comerciales
dan lastima
más temprano que tarde se queman
como arden los arribistas
y sólo quedamos tu y yo.
tu, escribiendo.
yo, como lector
esperando tu siguiente relato
añorando leer algo bueno
algo realmente bueno.
gracias, Andrea, por estas lineas dedicadas al autor y sus manuscritos. salud.
Publicar un comentario