jueves, 20 de diciembre de 2012

Y

Y te lo escribo ahora, bajo el calor y la desenvoltura de la embriaguez física y mental, Te amo, Andrés.

Bogotá, 2012

martes, 11 de diciembre de 2012

Entre-meses


I
Y ya que mi vida dejó de ser mi fuente, ¿sobre qué escribo?

II
Para el egoísta, el mundo no existe más allá de sus pies.

III
Si fácil es hablar, ¿por qué cuesta tanto escribir?

IV
Las palabras son momentos
Los actos hacen que las palabras no desperdicien su tiempo al aire.

Bogotá, 2012

viernes, 7 de diciembre de 2012

La responsabilidad del artista

¿Existe la responsabilidad del artista? ¿Pueden endilgarnos consecuencias como resultado de nuestros actos creativos?

Persigo y promuevo la irresponsabilidad, nadie debe ser parte de lo que haga y yo tampoco deberé reclamarle a nadie por lo que hizo. Eso es potestad de cada quien.

Bogotá, 2012

Declaración

Si la pérdida de memoria me garantiza la felicidad, bienvenida sea.

Bogotá, 2012

viernes, 30 de noviembre de 2012

Demiurgo

Para tantos que crean desde el delirio,
el hambre es poca cuando hay sed de crear.

Bogotá, 2012

domingo, 28 de octubre de 2012

Obliteraciones

Algunas veces se evitan esquinas, puertas y lugares que traen a la vida el recuerdo. 

Bogotá, 2012

lunes, 1 de octubre de 2012

Enajenamiento de la escritura

Avanza, colectiva en su soledad. Es un murmullo que adquiere la fuerza de manos que se multiplican. Son muchos y uno sólo el que escribe. Su vida pone el acento, el inicio y el final.


Bogotá, 2012

jueves, 27 de septiembre de 2012

Pincelada

Y escuché el llamado
y vi, a la distancia, tu luz.

Bogotá, 2012

viernes, 21 de septiembre de 2012

Concurso de blogs

Hola a todos:

Éste mi blog, que empecé un día cualquiera de 2006, está concursando en el I Concurso de Blog, organizado por la Universidad Alcalá de Henares, Google España, Madrid Network y monografías.com

Si lo siguen, les gusta y lo consideran apropiado, le agradezco su voto.


jueves, 20 de septiembre de 2012

Pez raro


Hija bella

Mi bella Amelia de siete meses y medio
Foto de Aníbal Romero


Mi bella hija, Amelia:

No sé por qué, no había subido una foto tuya a mi blog, lugar de mis delirios y recipiente de mis pensamientos y de mis sentimientos más profundos. No hay una excusa o razón para ello, nunca lo hay. No existen razones para explicar nuestros actos sin sentirnos incompletos con la justificación. Pero, hoy, aprovecho esta foto que tomó tu tío Aníbal, el día que comiste un trozo de carne por primera vez, para escribirte, para contarte lo feliz que me haces. Yo sé que no debemos buscar la felicidad afuera, porque sólo la encontraremos en lo más profundo de nuestro ser; pero como tú provienes de allí, te puedo decir que me haces ser feliz en toda la extensión y dimensión que puede asir dicha palabra.
Te amo, y amo a tu padre, Andrés, por estar y ser.

Bogotá, 2012

Ejercicio de escritura

Querido amigo:

Quisiera contarte ahora lo que veo desde mi ventana. Un vidrio que separa el afuera del adentro con la meticulosa simetría de una reja blanca. Afuera, hay un conjunto de hojas, entre verdes y cafés, que revolotean sobre las nubes animadas por el viento de la mañana. Detrás de eso, una fila de ladrillos, que significan un edificio a medio construir, del que cuelgan trapos y harapos. Más acá, ya casi al límite de mi cuerpo, montones de florecitas amarillas, apiñadas las unas con las otras, como se ve la gente dentro de los buses por las mañanas o en las horas de la tarde.
Adentro, unos muebles, que continúan una línea con el muro de mi sala hasta llegar a mis manos, subir por mis brazos y llegar a mis ojos.

Bogotá, 2012

Anagnórisis

No quiero reconocerme así, en un espejo.
En la imagen imprevista y accidentada de un reflejo.
Quiero otra manera
de saberme
yo
.

Bogotá, 2012

lunes, 17 de septiembre de 2012

Y

Y lo pensé, 
y creí que hacerlo sería una posibilidad
ahora
sólo
desgaste
ojos
inquisidores
bocas
que buscan
el quiebre


esto
sólo 
confirma
una vez más
mi rumbo
el nuevo
alejado de tanta
sabiduría
que hace
manos
frías
.


Bogotá, 2012

viernes, 14 de septiembre de 2012

Cierre de sesión

Cierro otra sesión para poder entrar en la tuya. No existe el diálogo; esa es una idea romántica próxima a la extinción. Ahora es un eterno monólogo interferido por el ruido de tus pasos, ni siquiera de tu voz.

Bogotá, 2012 

sábado, 11 de agosto de 2012

Niños por siempre

Los pies para adentro
pelo revuelto
carrito en las manos
arrastra su peso.

Bogotá, 2012

miércoles, 8 de agosto de 2012

Pequeño gorrión

Pequeño gorrión vuela sobre el cielo
azul
Pequeño gorrión
conoce
las hojas
de los árboles
sabe
que
el sol 
se posa
en el césped de la tarde.

Bogotá, 2012

martes, 7 de agosto de 2012

La música

La música, belleza y armonía. 
Aún si es, como dijo un poeta, la música de las horas,
se acerca a nuestro cuerpo,
se cuela por el oído
y por el alma
y sale convertida en movimiento,
en luz,
en fuerza, 
en alimento.

Bogotá, 2012

martes, 31 de julio de 2012

Al maestro

Buen viaje, Tizón, autor del bello libro La casa y el viento.


Bogotá, 2012

domingo, 29 de julio de 2012

El silencio también tiene voz

El vacío es redondo
el silencio grita
y lo negro es luz.


Bogotá, 2012

miércoles, 25 de julio de 2012

Y el rotulador habló...

Salidas por entradas

"No hay mal que por bien no venga" y "A caballo regalado no se le mira el colmillo", son dos de las expresiones que refuerzan nuestro imaginario particular sobre la fortuna. Heredado de los antiguos (probablemente), el hombre contemporáneo encuentra consuelo a sus cuitas atribuyendo el desencadenamiento de los hechos a su destino y a la 'pícara' fortuna.

Bogotá, 2012

domingo, 22 de julio de 2012

El caimán

¿Cómo hacer una película sobre un dirigente corrupto? ¿Quién se le mide a escribir el guión, pasárselo a un director, buscar un productor, seducir a un actor para que personifique al sujeto en cuestión?  Todo esto no hace parte más que del escenario de la acción, en el fondo el conflicto está en la vida del protagonista, en las escenas que él debe componer día a día para que los otros no se enteren de su drama.  Excelente cinta de la mujer orquesta, Nani Moretti.


Bogotá, 2012.

jueves, 19 de julio de 2012

Citas útiles

"La lección que podemos extraer de un mito reside en la literalidad del relato, no en lo añadimos nosotros desde afuera."

Esta cita es tomada de Seis propuestas para el próximo milenio, de Italo Calvino, libro al que se vuelve como al lugar deseado, y nos recuerda algo que el ejercicio mental que ejerce la crítica errada, provoca en los lectores, la búsqueda de un por qué inútil para el abandono de la lectura, cuando lo que debemos buscar es el modo en que el texto es texto en su intimidad. 

Bogotá, 2012

domingo, 15 de julio de 2012

Imposibilidades amorosas

"Los amores imposibles", cantata al deseo irrealizado y al amor utópico.


Bogotá, 2012 

Corre y déjalo correr

Hasta el agua, estancada, se pudre.


Bogotá, 2012

miércoles, 11 de julio de 2012

Expresiones comunes, lugares áridos

"Todos los juguetes", " En este orden de ideas", "Vaina", "Obvio", son sólo algunos de los ejemplos de expresiones que se usan y re-usan como aquella prenda de vestir de la cual no podemos prescindir. Pero de todas ellas, nada como el "Todos los juguetes". De dónde proviene esta expresión quisiera saberlo. En todo caso, empezó a circular por las bocas de la gente y se amañó entre el paladar y la lengua de muchos. Y yo, cada vez que la escucho, pierdo un poco de mi compostura, porque, a cambio de enriquecer nuestro vocabulario, se ha dedicado a empobrecer, con sus relaciones y usos, nuestro cerebro. 

Bogotá, 2012 

viernes, 6 de julio de 2012

Recensio y Dispositio

Hoy, en extenso viaje al norte de la ciudad, sufrí el mareo de Ceratti y Bajo Fondo, mientras escuchaba, por una de nuestras flamantes emisoras, una querella en torno a la columna de Azcárate en una de nuestras, también, flamantes revistas nacionales. El tema versaba sobre el puntilloso tema de la gordura. En un país de delgadeces de todo tipo, la desmesura de las carnes es tenida como un asunto de preocupación, y esto, me lo demostró la más de media hora que me tuvo la periodista (bueno, no la periodista sino el taxista, hay que dar crédito a cada quien en lo suyo), hablando con la Azcárate al otro lado del teléfono, mientras ella toma sus vacaciones de verano en París. Para los que me entienden, no es una redundancia mezclar vacaciones con el verano. En fin, iba yo diciendo que en medio de la delgadez de todo tipo que nos circunda, las gordas (que aún no sé por qué razón los gordos no alzaron su voz en grito y se mesaron, también, sus flacos cabellos) se sintieron profundamente ofendidas por lo que una firma como la de Azcárate puede decir en torno al tema (ojo que ella fue gorda en un tiempo anterior, por eso es que creo en lo de la reencarnación). La cosa fue que, como buena telenovela de nuestra flamante televisión nacional, el asunto terminó con consulta a la Gorda Fabiola, no sin antes pasar por el tema de la bulimia y de la anorexia, gesto este que, por supuesto, oxigenó la perorata entre estas dos mujeres.

Esta relación del evento no trata de demostrar lo descabellado del asunto, sino que, por el contrario quiere dejar un precedente de lo magro y ascético de nuestro pensamiento, y, como dijo, el buen hombre, en país de ciegos, el tuerto es rey.


Bogotá, 2012

jueves, 24 de mayo de 2012

Cuando me di cuenta, estaba rodeada de nombres de gatas. No eran nombres especiales, o que pertenecieran a algún tipo o raza especial. Eran nombres espontáneos, que fueron emergiendo conforme ellas iban apareciendo en mi vida. Las dos primeras, salidas, literalmente, del clóset de mi ropa, acapararon nombres afines con su personalidad. Creo que ellas fueron las que me susurraron el nombre que querían en mi oído. Luego, la tercera gata tuvo varios nombres antes del final; en todo caso, no le interesa responder a ninguno. Y el cuarto nombre fue para un gato al que creí gata y que tuvo un nombre tan breve pero contundente como él.

Bogotá, 2012

jueves, 17 de mayo de 2012

Sobre la mesa

La comida une, o si no que me lo digan a mí, a quien una buena porción de buenas y malas selecciones se han debido a algún plato. No me arrepiento de ninguna de ellas, porque a las malas las he borrado del menú y a las buenas las prolongo como se repite un buen vaso o un buen platillo o se visita, cuantas veces se pueda, algún sitio. 

Bogotá, 2012

lunes, 23 de abril de 2012

Amelia ya tiene letrAque #2 "El espejo", y tú, ¿qué esperas?

La bella Amelia entrega ejemplares de letrAtaque en La Publicatoria, 2012

El sábado, 21 de abril, la bella Amelia hizo presencia en La Publicatoria, evento organizado por las chicas de La Peluquería,  que contó con la participación de variadas e interesantes propuestas editoriales que están al margen de la ley y de los grandes sellos. Poca pretensión y mucho talento fue lo que se vio ese día en la inauguración del evento que estará algunos días más en A Seis Manos, un espacio muy agradable que está dando cabida a artistas y expresiones culturales, en el centro de Bogotá.

letrAtaque es una publicación, sin ánimo de lucro, y con mucho ánimo por las letras y el arte que, bajo un tema particular, promueve la escritura de cuentos, relatos, poemas; y la producción de ilustraciones, dibujos, grabados, fotografías.  El próximo tema es "Lo negro", ya sea pensamiento, sentimiento, género, estado. Hasta el 6 de julio, letrAtaque recibirá sus textos (máx. 500 palabras) o sus imágenes (en formato jpg). No se lo pierdan.

Bogotá, 2012

jueves, 19 de abril de 2012

La marea

Ya no sostiene más Pereira, porque lo que cesó poco importa. Importa más un error inexistente de una cantante colombiana que habla con acento español (yo hubiese despotricado de su pinta, no de la letra intrincada y transparente de nuestro símbolo patrio. Ya bastante hazaña es que alguien la cante sin olvidar alguna palabra).
Ya no sostiene más Pereira, pero que no lo haga poco importa porque los gringos se acostaron con prostitutas (chicas prepago, que suelen llamar ahora), en esa ciudad esquizoide que queda a orillas del mar, y no les pagaron. Error craso, demeritar el trabajo de los otros y creer que poco o nada vale. El arte también tiene su precio.
Ya no sostiene más Pereira, aunque a nadie le importa quién diablos es ese Pereira y por qué ya no sostiene, importa más el menú del ex-beatle que hace que gente, sin trabajo o con él, se estacione por horas y horas en la entrada de un hotel a recibir las migajas de un saludo tras el vidrio de un auto escoltado, o el concierto de una diva a la que sus canciones y su pinta de colegiala trasnochada le hacen ver que los años no pasan en vano y que es hora de venir a esa ciudad que siempre oyó mencionar, la que tiene un tren, la de Pablito, a tramar con su pasado el presente y los bolsillos de los que pagan la boleta de su show.
Ya no sostiene más Pereira, o tal vez sí, y es probable que ahora sostenga con más empeño la mano del escritor que repitió una y otra vez esta frase en una novela.

Bogotá, 2012

lunes, 26 de marzo de 2012

Sobre lo caradura del Facebook

Correo de brujas que se ha vuelto la sección de "Comentarios" y "Me gusta" en Facebook. Ahora lo interesante no es ver el estado de los "Amigos", ni las fotos que ingresaron nuevas a la galería, sino todos los comentarios que dichas entradas suscitan. La democratización de la información, dirían unos; el monumento a la verborrea, dirán otros. Cierto o no, estas visitas se tornan más divertidas que conocer qué están pensando los más de 150 amigos virtuales que tengo cuando no estoy muy segura de cuántos de ellos son reales.

Bogotá, 2012

jueves, 22 de marzo de 2012

La petisa Macarena


La vida de Macarena sólo ella la conoce. Como debe ser. Nadie más sino ella. Cruzó la calle y consiguió un hogar, otro hogar. Probable que haya tenido alguno, si es que a hogar se le puede llamar un rincón o una pequeña cueva en algún garaje.

Bogotá, 2012

martes, 20 de marzo de 2012

Una mosca en el vaso de leche


No tomo leche. Su sabor y su olor me estremecen. Durante un viaje, una mujer me dijo que ese rechazo me hacía más independiente, menos sujeta a ataduras. No más desinhibida. Eso nunca lo he sido. A mi hermano le encantaba la leche cuando pequeño, le decía jugo de vaca. Tomaba mucha leche. Un día, mi papá nos llevó a una finca. En la finca había una vaca. La señora sabía que a mi hermano le encantaba la leche. Mi hermano vio cómo ordeñaban a la vaca. Le ofrecieron un vaso de la leche de esa vaca. Nunca más volvió a tomar leche. No le he preguntado a mi hermano si ha vuelto a tomar leche. Vive lejos. Y cuando hablamos, hablamos del clima, de su vida, de las niñas. Nunca de las vacas o de la leche.

Bogotá, 2012

miércoles, 29 de febrero de 2012

Conversaciones

Mural callejero

En las páginas de un libro cualquiera se inserta la historia de estos animales. Un día, no importa qué día, alguien lee palabras que se vuelven frases y frases que se convierten en párrafos.

Bogotá, 2012

miércoles, 22 de febrero de 2012

Calaveradas

En andanzas por el barrio, miren lo que encontré,
con una calaverada me topé.


Cuando sonaba el teléfono, yo levantaba la bocina.

Luego decía "Aló", y si al otro lado no respondían imaginaba que se trataba de una calaverada.

No de un mudo, como lo llamaba mi madre,

Ni de una falla en la comunicación, como le decía el técnico que revisa las líneas.

No he vuelto a recibir ninguna,

Calaverada, claro está,

Porque ya no doy mi número a nadie.

Bogotá, 2012

viernes, 10 de febrero de 2012

Una experiencia de angustia pasajera



He experimentado la angustia ante una pérdida de memoria que me impidió, por dos días, entrar a uno de mis correos y al blog. Esta pérdida, patrocinada por mi nueva condición tras la llegada de la bella Amelia, y mi exagerada permanencia, en este último tiempo, en mis dispositivos móviles, que le hacen a uno la vida más fácil y cliqueable con tan sólo acceder a un icono, ha actuado en detrimento de mi memoria para aquello que no se debe olvidar.

Pasado el episodio de confusión, he recuperado la compostura y, espero, el ritmo de la escritura, ahora que los horarios y las actividades de la bella Amelia (que en este momento se concentran en comer y dormir, y ser divina) van, poco a poco, dejando de ser desconocidos para mí.

Bogotá, 2012

miércoles, 4 de enero de 2012

La recurrencia de las imágenes

En la más reciente película de Terrence Melick, El árbol de la vida (2011), aparece una y otra vez la imagen de un árbol: la cámara, desde abajo, atraviesa el follaje para llegar hasta el sol. Esta imagen, una de las preferidas por Sofía Coppola en sus cintas, tiene una fuerza que proviene del movimiento vertical y ascendente que describe y que sitúa a quien observa en su propio punto de observación; es decir, le susurra al oído su tal vez olvidada o poca advertida ubicación. Desde la tierra, el ojo contempla fragmentos de luz que son advertidos gracias a la intromisión de las hojas entre cada uno de los extremos. Algo de esta dinámica de la contemplación es lo que propone Melick en esta cinta que, como lo dice acertadamente Carolina Sanín en la revista Arcadia, anula en el espectador su capacidad de ser contada a otro. La experiencia de narrar al otro el evento de la luz a través del follaje es anulada, así mismo, en el momento en que se da cuenta de ella. Nunca el narrador podrá superar el plano de lo visual sin entrar en el territorio de la metáfora o de lo simbólico. Sólo, en la imagen misma que colma la pantalla de exhibición, puede el observador asistir a la experiencia real que esta imagen propone, de igual modo en que la cinta de Melick se convierte en una película para cada uno de los espectadores.

Bogotá, 2012

domingo, 1 de enero de 2012

Bajo pedido

Hoy, en el recorrido de las calles por la mañana, aprovechando el sol de estos días y la tranquilidad de la ciudad, encontramos un libro de la hija de J. D. Salinger, Margaret A. Salinger, titulado "El guardián de los sueños", que he empezado a leer esta tarde, aprovechando el sol que se cuela por entre el follaje del árbol que da contra la ventana de la sala. Después de un recorrido por las fotos que se intercalan entre el texto, he avanzado un poco en la lectura y en la vida de este misterioso escritor de la mano de su hija y del modo en que ella, a partir de sus textos literarios (cuentos y novela), reconstruye la vida de un autor para quien vida y literatura fueron la misma cosa.

Bogotá, 2012