jueves, 17 de mayo de 2012

Sobre la mesa

La comida une, o si no que me lo digan a mí, a quien una buena porción de buenas y malas selecciones se han debido a algún plato. No me arrepiento de ninguna de ellas, porque a las malas las he borrado del menú y a las buenas las prolongo como se repite un buen vaso o un buen platillo o se visita, cuantas veces se pueda, algún sitio. 

Bogotá, 2012

1 comentario:

Anónimo dijo...

De acuerdo. Se vive y se ama según se come.