viernes, 30 de octubre de 2009

Después del almuerzo

Cada vez me abruma más
Que los ojos se den vuelta para mirar la cuenca que los hospeda
Que las manos se repasen con el fervor del recién amante.

Onán conduce a la tierra estéril
porque yo con yo no me reproduzco.

Bogotá, 2009

1 comentario:

Ramón Bejarano dijo...

De verdad que te leo y te leo y cada vez me abrumas más (sin contar aquel cercano día que la vi a sumerced y sin pensarlo quedé como el hombre de la gorra con bandera y sí, ¡obvio!, el radio; aquel que camina urgente, sin saber nunca hacia donde va, esta ciudad).